Montpellier (Francia), 5 mar (EFE).- Los alcaldes de las ciudades de Barcelona, Girona, Figueres, Béziers, Montpellier, Narbonne, Perpignan y Toulouse han decidido "pasar a la acción" y ejercer una mayor presión estatal y europea para que se aceleren las obras del tren de alta velocidad que conectará Francia y España.
Los representantes de estas ciudades, que el pasado mes de octubre se constituyeron en Barcelona como "lobby" de presión, han mantenido hoy en Montpellier su segunda reunión de trabajo, en la que han destacado la necesidad de ejecutar "lo antes posible" esta interconexión ferroviaria, que consideran "prioritaria" y "absolutamente imprescindible".
El alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, ha recordado que las obras del AVE entre la capital catalana y la frontera francesa ya están en marcha, aunque no así los tramos entre Perpignan-Montpellier y, más al norte, Montpellier-Nîmes.
En este segundo caso, las obras están a punto empezar, con el objetivo de que la infraestructura entre en funcionamiento en 2013, mientras que en el tramo Perpignan-Montpellier el Gobierno francés abrirá el próximo 12 de marzo el período de debate público. Su puesta en marcha no está prevista, como mínimo, hasta el año 2020.
"Lo que interesa es que las obras no se paralicen. En España todo está en marcha, así que ahora tenemos que procurar que en Francia también se movilice todo para que las obras se inicien a tiempo", ha remarcado Hereu.
Los alcaldes de las ocho ciudades catalanas y francesas han firmado una declaración conjunta en la que celebran la próxima apertura del período de alegaciones del tramo Perpignan-Montpellier y manifiestan su firme voluntad de ser parte activa en este debate para que se elija la opción más favorable para el futuro y el desarrollo de las regiones.
Tal y como ha recordado la alcaldesa de Montpellier, Hélène Mandroux, el Gobierno galo se plantea varias alternativas para ese tramo de 155 kilómetros, como es construir una línea de alta velocidad sólo para pasajeros; una mixta, para viajeros y mercancías, o mejorar el actual trazado ferroviario.
La voluntad de los alcaldes es trabajar individualmente estas propuestas para poner después en común sus diferentes puntos de vista y expresarse "con una sola voz".
"Pasaremos de una declaración de intenciones a la acción. Pasaremos a ser un agente activo en este debate y haremos llegar nuestras alegaciones y opiniones", ha afirmado el alcalde barcelonés, que ha subrayado el hecho de que Cataluña pueda participar en el proceso de alegaciones que abrirá el Estado francés.
Hereu y Mandroux, acompañados del resto de alcaldes, han destacado la importancia de acelerar la interconexión ferroviaria entre Francia y España, una obra, han dicho, que "tiene una enorme importancia para las ciudades, las regiones y los estados", ya que permitirá "vincular estrechamente" el norte y el sur de Europa.
"Es una oportunidad que no dejaremos pasar. Nos jugamos el desarrollo de Cataluña y por eso queremos ser una voz y un agente actor en este proceso", ha subrayado Hereu.
Los representantes locales están dispuestos a acudir a Bruselas (Bélgica), sede de la Comisión Europea, para hacer entender la importancia de la línea ferroviaria entre Barcelona y Nîmes, no sólo para Cataluña y Francia, sino para el conjunto de Europa.
Por el momento, los alcaldes han decidido enviar la declaración de esta última reunión a los respectivos gobiernos regionales y nacionales y a la Comisión Europea, así como a las Cámaras de Comercio y demás autoridades competentes en materia de planificación de transportes.