| | | He estado pensando en el artículo que tiene usted frente a sus ojos. Se me ocurre que hay muchas cosas en el ambiente y, al mismo tiempo, estamos en el marasmo al que ya nos tienen acostumbrados nuestros políticos y nuestra muy pintoresca realidad. Ahí les van. Las señales y la Corte
Dos decisiones ha tomado la Corte, en días recientes, que tienen una gran influencia en la vida productiva y cotidiana de los mexicanos. La primera, fue declarar nula la licitación 21 que hizo la Cofetel, y que dio como ganadores a la asociación entre Nextel y Televisa, para utilizar ciertas frecuencias en telefonía celular y otros servicios. La segunda, el día miércoles, la ministra Olga Sánchez Cordero dio entrada al reclamo de los legisladores que argumentaban que el apagón analógico decretado por el presidente Calderón, que adelantaba la transformación digital debería darse seis años antes, no era legal, pues invadía facultades de la Cofetel. En el primer caso, las consecuencias no son despreciables. Televisa y Nextel tenían planeada una inversión de alrededor de 20 mil millones de pesos, que generaría empleos, aumentaría la competencia y reduciría costos para los usuarios. En el segundo, la búsqueda de competencia y el adelanto a la inversión en la materia, hubiera traído consecuencias igualmente benéficas para el desarrollo del sector y la modernización de distintos espacios del desarrollo económico. Además de que liberaría una buena parte del espectro para reorientarlo a nuevos jugadores que generaran competencia y diversidad. Mas allá de los argumentos legales, lo que parece claro es que la ley no alcanza a ordenar y alinear a los jugadores del sector. Las acciones de Iusacell en contra de la licitación 21 (alrededor de 70 recursos) y la renuencia de muchos de ellos para aceptar más competencia, se expresa en el cúmulo de juicios que muestran la enormidad de recursos e intereses que están en juego y como, ni la ley, ni las autoridades pueden lograr el mínimo consenso para hacer avanzar el desarrollo del sector. Lo mismo sucede con el apagón analógico. Parece claro que algunos diputados están cercanos a los intereses de algunas televisoras, al punto que pueden promover una controversia para detener lo que a todas luces es benéfico para los consumidores. La Corte, entonces, tiene que resolver. Pero la Corte no tiene, en principio, otra labor que hacer valer la ley y no una visión de política pública o de orientación sectorial o de desarrollo del sector o de beneficio a los consumidores. Mientras más cosas caigan en la Corte, paradójicamente en estos asuntos, menos certeza jurídica y de política pública tendremos. Otro escollo mas para el desarrollo nacional. Los cabilderos y el Congreso
A propósito de cambios de opinión, uso de la Corte o tareas legislativas, la Cámara de Diputados decidió abrir un boquete en las inversiones de tabacaleras y empleos creados, para ponerle siete pesos más de costo a cada cajetilla de cigarros. Los diputados se dijeron de todo unos a otros, Di Costanzo, del Partido del Trabajo (el Partido del Tabaco, le dijo Vidal Llarenas, del PRD) acusó a varios diputados, entre ellos este último, de recibir beneficios económicos de farmacéuticas que venden ansiolíticos para dejar de fumar, dejando ver que son estas grandes empresas quienes están atrás del incremento de este impuesto. Vidal Llarenas no se quedó atrás, le dijo al diputado del PT que ellos han recibido dinero de las tabacaleras para defender sus intereses… ¿será? Bueno, hasta el buen Alberto Cinta salió raspado por Di Costanzo quien en una noche le dijo hasta incongruente por querer "defender a los jóvenes" y al mismo tiempo ser dueño de restaurantes y bares… Ahora sí "se aNoroñó"… pero saque usted sus propias conclusiones, a mí este tipo de debates me parecen francamente lamentables. Sin embargo, algo rescatable dejan. Ahí está nuevamente el tema del cabildeo sobre la mesa. Muchas acusaciones, pocas pruebas y sanciones. Urge una revisión para legislar en la materia, para conocer qué actores y cómo es que se acercan al Congreso. El cabildeo puede dar buenos resultados, pero no en lo oscurito. Una nota
El sábado pasado, me hizo pobre favor el diputado Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, actual "Rey de la basura", de enviar al correo de este medio, una carta muy en su estilo. Dos cosas merecen decirse, al respecto: la primera, es que el artículo del viernes, no era para él, pero solito se puso el saco. La segunda, que cada quien expresa con sus acciones, y en ocasiones con la pluma que no conoce, la dimensión de su persona. miguelgoco@gmail.com |