El proyecto EUCAARI ("European Integrated Project on Aerosol Cloud Climate and Air Quality Interactions") ha proporcionado una nueva perspectiva sobre la manera en que los aerosoles afectan al balance radiativo del planeta.
Se ha dado un paso más en los esfuerzos dirigidos a mitigar el impacto de los aerosoles a escala mundial gracias al proyecto de investigación más amplio sobre estos elementos realizado hasta ahora en Europa.
Un apartado importante del estudio consistió en una investigación sobre los aerosoles usados actualmente en aplicaciones de refrigeración, que está previsto que se reduzcan drásticamente de aquí al año 2030. Ello ha motivado que desde el proyecto se haya hecho un llamamiento a la implantación en todo el mundo de medidas más rigurosas sobre reducción de la contaminación atmosférica.
Con el fin de lograr progresos sustanciales al respecto, se emprendió este proyecto coordinado por el profesor Markku Kulmala de la Universidad de Helsinki, respaldado por un consorcio de 47 socios de 32 países europeos y dotado de un presupuesto de 15 millones de euros (10 de ellos proporcionados por la Unión Europea).
El laboratorio de EUCAARI inició una serie de estudios de campo extensos dedicados a recabar información nueva sobre las propiedades de las nubes y los aerosoles y realizados desde plataformas terrestres, aerotransportadas y satelitales repartidas por Europa, China, Sudáfrica, Brasil e India.
Los investigadores estudiaron la emisión y la formación de los aerosoles, su evolución y transformación durante su permanencia en la atmósfera, y su repercusión en las nubes. Seguidamente, los datos obtenidos se integraron en los corpus ya existentes para obtener un banco de datos de alcance mundial. Este método facilitó a los investigadores la tarea de comprender los efectos de los aerosoles sobre la calidad del aire y el clima.
Técnicas y tecnologías
Otro tema de trabajo del proyecto fueron las técnicas y tecnologías para la medición de los aerosoles, así como su relación con la contaminación atmosférica y las interacciones con el cambio climático. Tras proyectar el cambio climático venidero, desarrollaron estrategias consecuentes y aplicaron planes para la vigilancia de la calidad del aire mundial.
También crearon nuevos instrumentos de medida de aerosoles empleando algunos de los instrumentos científicos más complejos que existen, entre ellos un espectrómetro de cúmulos (cluster spectrometer) al que puede accederse simultáneamente desde numerosos puntos, incluidas plataformas aerotransportadas. También se desarrollaron nuevas técnicas instrumentales para observar las distintas propiedades de los aerosoles atmosféricos.
Los logros del proyecto en conjunto fueron muy notables. En concreto, los nuevos conocimientos físicos sobre la formación de los aerosoles y sus repercusiones a todas las escalas, desde la micrométrica hasta la global y desde los milisegundos hasta los siglos.
Además, el equipo del proyecto midió los efectos sobre las concentraciones de aerosol de reducciones abundantes en la emisión de partículas y sus precursores tanto dentro como fuera de Europa. Cabe destacar que EUCAARI también contribuyó a cumplir los requisitos científicos emanados de la Estrategia temática sobre la contaminación atmosférica de la UE.
En definitiva, sus responsables opinan que el proyecto ha imprimido un impulso inestimable a la investigación atmosférica. Sus hallazgos allanan el camino hacia la realización de evaluaciones e investigaciones más pertinentes y documentadas y hacia la obtención de soluciones prácticas a los problemas que plantea la contaminación en toda la Tierra.